De todos es sabido que el estrés provoca en el organismo una serie de daños que pueden ser irreversibles. Esto es algo común tanto en las mujeres como en los hombres.

Síntomas del estrés

Los hombres son más sensibles a la adrenalina que las mujeres. Es verdad que en pequeñas dosis permite ser más eficaz y reaccionar mejor en caso de peligro. Pero, si los estímulos que llevan a la producción de adrenalina se repiten mucho, el organismo se queda sin recursos necesarios para combatir el estrés.

Entonces, la válvula de seguridad explota, provocando cansancio, cólera y depresión. Los síntomas derivados del estrés son estos: estado de alerta permanente, resistencia y después agotamiento. He aquí algunos consejos para combatir el estrés.

1. Determinar los factores ansiógenos

Combatir el estrés en los hombres 1Una primera cosa es tomar conciencia de aquello que nos pone de los nervios, ya que con esto habremos comenzado a combatir el estrés.

Conocer cuáles son los momentos en los que el ritmo cardíaco se acelera, o cuándo tenemos dolor de espalda, o cuándo nos enfadamos.

2. En el trabajo, gestionar las prioridades

El 48% de las personas activas consideran que la urgencia y el volumen de trabajo es la causa primera del estrés. Para combatirlo con cabeza, debemos coger al toro por los cuernos, y eso lo hacemos organizándonos.

Debemos establecer un planning semanal, definiendo el nivel de prioridad de las tareas a realizar, en función de su importancia. Lo ideal es comenzar por lo más urgente, y lo que tenga mayor importancia laboral.

3. Evitar tener que conducir

El 60% de los males que se le pueden imputar al coche proceden del estrés. Lo mejor es utilizar el transporte público, o compartido.

4. El descanso del guerrero

El hogar debe ser un remanso de paz, para acoger el descanso del guerrero. Cultivad las buenas relaciones con vuestros vecinos y amigos, para que ellos no se convierten en un problema más que solucionar.

Si vivís en pareja, no os olvidéis de pedirle a vuestra compañera o compañero que os dé un buen masaje.

5. Evitar el insomnio

Está claro que un buen descanso permite que nos recuperemos con mayor facilidad. El organismo se adapta mejor a los horarios regulares y a las actividades que nos ayudan a descansar antes de ir a la cama.

6. Practicar deporte

El esfuerzo físico nos permite liberar dopamina y endorfinas, que son las hormonas del placer, y que producen sueño tras una relación sexual. Así que a buen entendedor pocas palabras… Por otro lado, la natación nos ayuda a poner en movimiento todo nuestro cuerpo y a distender todos los músculos contraídos durante la jornada laboral.

7. El método zen

Las actividades tipo zen, tales como el yoga o la sofrología están recomendadas para luchar contra el estrés. Los ejercicios de meditación, de concentración y de respiración nos permiten reequilibrar nuestros centros energéticos.

8. Cuidado con el café

Es verdad que el café tiene una propiedad de estimulación en el organismo, pero a la larga produce el efecto contrario. Evitar tomar café en grandes cantidades, sobre todo a mediodía. Algunas plantas tienen virtudes relajantes como la tila, la pasiflora o la valeriana, y pueden ser un buen sustitutivo del café.