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La mayoría de las personas que comienzan una dieta para bajar de peso tienen la falsa creencia que deben resignarse a dejar de comer platos sabrosos y solo ingerir aquellos más simples o con poca preparación. Sin embargo, si se aprende cómo quitar calorías a las comidas será posible disfrutar de recetas excelentes y adelgazar al mismo tiempo.

El reemplazo de ciertos alimentos es esencial, por ejemplo sustancias grasas o alimentos muy azucarados por otros que existen en el mercado tales como los diet o light, como por ejemplo yogur natural, quesos bajos en calorías, gelatinas bajas calorías, frutas frescas y postres preparados con edulcorantes especiales son excelentes opciones para añadir al menú diario.

Cómo quitar calorías a las comidas En las comidas puede utilizarse por ejemplo salsa bechamel preparada con caldo de vegetales diet en vez de agregar leche o nata y mantequilla y reemplazar la mayonesa por queso cremoso light. Si se desea salsa golf basta con agregar unas cucharadas de salsa de tomates al natural previamente procesada.

Existen también las mayonesas bajas en calorías o en su lugar la que puede prepararse de forma casera con puré de zanahorias mezclado con una cucharada de aceite de oliva y una cucharadita de sal.

Cocinar los alimentos al horno, la parrilla o al vapor dejando de lado todo tipo de cocciones fritas.

Quesos de consistencia cremosa pueden reemplazarse por ricota o los del tipo Philadelfia.

La carne vacuna puede formar parte del menú diario pero eligiendo siempre aquellas que tienen poca grasa y en vez de comer embutidos reemplazarlos por pollo o pavo, ideales para hacer sándwiches de pan integral.

El azúcar puede sustituirse por edulcorantes artificiales, pero sin abusar de ellos o bien utilizar el azúcar sin refinar.

En recetas que llevan huevo utilizar solo la clara reduciendo así el aporte de grasas siempre que la preparación supere la unidad.

Preparar pasteles y tartas reemplazando parte del azúcar por puré o compota de manzana.

Estos consejos pueden utilizarse tanto cuando se quiere perder peso sin dejar de comer platos sabrosos o cuando no se desea sumar calorías al menú diario, teniendo siempre presente que a mayor cantidad de grasas e hidratos de carbono de los que se necesitan diariamente ambos se almacenarán como reservas en el cuerpo.

Si se desean eliminar los depósitos de grasa acumulados en el cuerpo se debe entonces reducir la ingesta de grasas e hidratos de carbono, generando así un balance calórico negativo que movilizará las reservas para enfrentar el gasto energético diario.