Todos hemos sufrido alguna vez la aparición de esas trazas blancas sobre los hombros. Muchas veces descrita como una falta de higiene, la caspa es en realidad algo debido a la naturaleza del cabello que puede ser más o menos seco. Veamos algunos consejos para comprender de dónde procede la caspa y saber cómo combatirla.

El origen de la caspa

La caspa se debe a una renovación demasiado rápida del cuero cabelludo, lo que conlleva la pérdida de microtrozos de piel, que puede ser más o menos abundante. Las personas que tienen un pelo graso tendrán mayor tendencia a desarrollar caspa. También puede estar relacionado con diferentes enfermedades de la piel como el acné o la psoriasis.

Los factores de aparición de la caspa

Las razones son variables. Por un lado están los factores internos: el estrés, la angustia y la ansiedad, sobre todo en los hombres, un régimen alimenticio demasiado ácido, problemas de asimilación digestiva… El hígado puede estar afectado.

CabelloPor otro lado, el uso demasiado frecuente de champús detergentes es el factor externo principal. Pero el enjuague mal hecho, el uso abusivo de gel y laca, los brushings agresivos, llevar un casco de moto y gorras demasiado ceñidas también son factores que provocan estos síntomas. El invierno es igualmente un enemigo para este problema.

Prevenir la aparición de caspa

El uso regular de un champú es lo más recomendable. En efecto, lavarse el pelo con un producto adecuado permite evitar que el cuero cabelludo se engrase. Se debe prioridad a un champú anticaspa. También conviene evitar el uso de un secador de pelo, responsable de la sequedad del cuero cabelludo.

Soluciones radicales

Si la prevención no tiene demasiados efectos, siempre se puede intentar con una loción especial. Existen muchos productos en el mercado, como champús a base de cinc o aceites esenciales. También está la posibilidad de acudir al médico que podrá recetar un tratamiento adaptado a los problemas concretos de cada persona.