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Todas las personas que comienzan a entrenar en el gimnasio deben someterse a una revisión médica completa para determinar su estado de salud y condición física antes de iniciar cualquier programa de ejercicios.
Es fudamental que esta evaluación sea realizada por un médico deportivo e incluya una valoración del riesgo cardiovascular, además de la exploración física completa, evaluación del aparato locomotor y una historia de antecedentes.
En España y otros paises de la Unión Europea, los gimnasios cuentan con un especialista en medicina deportiva que se encarga de hacer tanto la evaluación inicial como el seguimiento interanual.
Hazte una revisión deportiva a fondo 1Según el Dr. José Naranjo Orellana, Secretario de la Federación Española de Medicina del Deporte, «en general, las revisiones que nos realizan en los gimnasios son suficientes para detectar los problemas más habituales».
Es de gran importancia saber en que condición se está antes de comenzar un programa para perder peso, entrenar musculación o cualquier otra práctica deportiva. Esta información marcará tanto la pauta de inicio como las opciones para aumentar los niveles de exigencia física.
Si en tu gimnasio no cuentas con un servicio médico que realice tal estudio, lo mejor es que cambies de gimnasio, y si eso no es posible, entonces que busques un médico deportivo para hacer esa revisión médica inicial.
El mismo Dr. Orellana da las pautas para un examen perfecto, veamos sus indicaciones.

La historia clínica

Incorpora los datos de antecedentes personales y familiares, habitos, y todo aquello vinculado con la salud biopsicosocial. Es ese momento en el que respondemos al médico una serie de preguntas, algunas de las cuales puede resultar un tanto engorrosa pero que debemos contestar.
De esta forma le ofrecemos a nuestro médico del deporte valiosas pistas que le permitirán descubrir, entre otras cosas, si es probable que acabemos sufriendo problemas cardiovasculares.
Se debe responder con sinceridad las preguntas refrentes a los antecedentes personales y familiares de hipertensión, síncopes, taquicardias, diabetes, obesidad, así como otras enfermedades.

La exploración física

Es algo que conocemos casi en todos sus detalles, incluye medidas de peso y estatura, palpaciones de la zona abdominal, revisión de articulaciones, cálculo del índice de masa corporal, y, medición de la presión arterial.
Para que sea completa debe incluir un electrovardiograma en reposo, prueba de esfuerzo y una espirometría. Con la información recabada de estas pruebas se puede establecer la condición de nuestro sistema crdiovascular.

La valoración del riesgo cardiovascular

Algo que no suele estar incluído en estas evaluaciones médicas realizadas en los gimnasios son las analíticas sanguíneas, imprescindibles para establecer el riesgo cardiovascular. Así que deberás hacerte una que incluya por lo menos los valores de colesterol y glicemia.
Lleva estos resultados al momento del examen para completar tu historia. El Dr. Naranjo afirma que la valoración del riesgo cardiovascular es «Importantísima, sobre todo si hablamos de personas que van a practicar deporte por primera vez».
Teniendo en cuenta factores como la edad, el peso, el IMC, los niveles de colesterol y glucemia o la presión arterial, el especialista te asignará un estrato de riesgo, que determinará las probabilidades de que sufras problemas cardiovasculares.

El examen del aparato locomotor

Debería incluir una valoración de la posición de la columna vertebral para descartar desviaciones u otras patologías, y un análisis del nivel de las caderas y de la longitud de los medios.
El especialista también debería poner a prueba la movilidad articular de caderas, rodillas, codos, etc., nuestra flexibilidad, y nuestro balance muscular para comprobar, entre otras cosas, si sufrimos pérdidas de fuerza.

Los resultados e indicaciones

Una vez recabada y analizada la información, pueden suceder dos cosas:
– En el peor de los casos, es decir, si el médico del deporte ha detectado algún problema, será él quien se encargue de hacernos una prescripción de ejercicios que se ajuste a nuestros objetivos y minimice los riesgos.
– Si el especialista descarta patologías o factores de riesgo, será el entrenador o monitor de sala, sin descartar alguna indicación del médico del deporte, quien se encargue de diseñarnos la rutina de entrenamiento.
En ambos casos debemos ser responsables y vigilar por el correcto cumplimiento de las indicaciones recibidas en cuanto a como y cuanto entrenar, mas aun si es la primera vez que lo hacemos.

Evaluaciones periódicas

Esto no es un examen para hacerlo una vez y ya está, es importante establecer las variaciones en el tiempo, y para ellos deberás someterte por lo menos a la misma evaluación cada dos años.
Los controles médicos periódicos son útiles tanto para saber como has progresado como para detectar posibles problemas que surjan con el paso del tiempo. Has las cosas bien y no dejes de hacerlos. Un chequeo que, si hay antecedentes de problemas cardiovasculares o se tiene mas de 45 años, debería convertirse en anual.