Razones para beber agua

El agua garantiza una serie de funciones en nuestro organismo. En primer lugar se trata de un constituyente importante del plasma sanguíneo. También es un carburante de primer orden para destruir las toxinas y los residuos de los que nuestro cuerpo no tiene necesidad.

El agua es un excelente lubricante para los tejidos, las articulaciones. Son muchos los órganos que necesitan el agua para funcionar correctamente. Además, el agua regula la temperatura del cuerpo y facilita la digestión y el tránsito intestinal. Si bien es cierto que el cuerpo necesita beber un litro y medio de agua al día para funcionar correctamente, también es verdad que esta necesidad aumenta considerablemente cuando se transpira.

Hidratarse bien durante la práctica del fitness 1Por esta razón, es primordial beber durante una sesión de fitness. El agua mejora los rendimientos físicos, ya que garantiza la cantidad suficiente de plasma sanguíneo para transportar el oxígeno a los músculos para que optimicen el esfuerzo.

También optimiza el funcionamiento del corazón, puesto que el buen ritmo de bombeo de la sangre depende de la calidad y del volumen del plasma. Por otra parte, el agua interviene a nivel de la adenosina trifosfato y de las grasas, y las transforma en energía para garantizar la contracción muscular y evitar los calambres.

¿Cómo beber agua durante el fitness?

Empezar a beber agua dos horas antes del entrenamiento. En cuanto a la dosis, menos de un litro basta si tenéis pensado realizar una sesión media, sin riesgos de transpiración excesiva. El volumen que se debe beber aumenta en función de los ejercicios previstos, pero no abuséis puesto que podéis provocaros un flato.

Durante el entrenamiento, se deben beber dos buenos buches (entre 100 y 200 ml), cada cuarto de hora, para recuperar el volumen de agua perdido por la transpiración, y evitar la sensación de sed. Después se recomienda seguir bebiendo, incluso una vez terminado el ejercicio, para rehidratar el organismo correctamente.

Lo ideal es beber agua embotellada o zumo de frutas sin azúcar para un entrenamiento medio. Si practicáis un deporte más intenso, es decir durante más de una hora seguida, podéis tomar algún tipo de bebida energética (pero sin confundirla con bebidas energizantes).

Las bebidas energéticas están adaptadas a los deportistas. Proporcionan numerosos nutrientes que reemplazan los elementos perdidos por el sudor. Las bebidas para deportistas ayudan al organismo a producir bastante energía. Si practicáis algún tipo de deporte en el exterior, es bueno saber que en altura la necesidad de hidratación es mayor. Y beber, siempre es necesario, haga frío o calor.