El peeling es también una técnica para el tratamiento de la piel de los hombres. Porque el mantenimiento de un rostro en buena salud y belleza no se limita únicamente a un golpe de agua fría por la mañana y por la noche, es importante su cuidado en profundidad. Más allá de la limpieza diaria, un peeling puede ser muy eficaz. Pero, ¿de qué se trata concretamente? ¿Cómo funciona? No os preocupéis porque ahora os vamos a decir todo lo que conviene saber sobre el peeling para el rostro.

¿Por qué efectuar un peeling?

Durante el día, el rostro se ve agredido, sucio, contaminado por el entorno a través del viento, el frío, el tabaco, la contaminación, etcétera. Pero también, sin poder combatirlo de forma eficaz, por uno mismo, ya que la producción de sebo y la transpiración es algo imparable sobre la piel.

De golpe, los poros del rostro se ven obstruidos, aparecen puntos negros, y aveces granos, y la tez se vuelve gris, pierde su brillo, su elasticidad y tonicidad. En general, una limpieza diaria para el rostro es suficiente, pero solo limpia en superficie. Si se pretende limpiar en profundidad la piel del rostro, conviene efectuar un peeling o aplicar una mascarilla.

Peeling

¿De qué se trata concretamente?

Los productos para el peeling reciben varios nombres: desincrustantes, exfoliantes, etcétera. La acción principal de estos productos de belleza es una especie de lijado superficial sobre la piel a través de micropartículas que liberan los poros de la piel de las impurezas que se alojan y los obstruyen, y a través de un masaje con los dedos sobre la cara.

La finalidad de un peeling es la de limpiar el rostro en profundidad, desprenderlo de células muertas, y desbloquear los poros de la piel. De esta forma el peeling del rostro:

  • Contribuye a la evacuación de los puntos negros,
  • disminuye el riesgo de infección debajo de la piel que provoca granos,
  • afina el grano de la piel porque los poros desobstruidos se cierran,
  • suaviza y alisa la piel,
  • mejora la tez desvitalizada,
  • suaviza los vellos de la barba y prepara el rostro para el afeitado.

¿Cómo se realiza un peeling del rostro?

Tras la limpieza del rostro, conviene aplicar un producto de belleza sobre una piel húmeda. Luego se realiza el peeling suavemente durante 1 a 2 minutos, evitando frotar con fuerza para que no surjan irritaciones y enrojecimientos.

Conviene insistir en la parte mediana del rostro, es decir la frente, la nariz y el mentón, evitando prudentemente el contorno de los ojos que es muy frágil. Luego se enjuaga con agua templada, o fresca. Es muy importante hidratar posteriormente la piel tras efectuar un peeling.

¿Cuándo hay que hacerlo?

Si la limpieza del rostro se realiza cada día, el peeling se recomienda de una a dos veces a la semana, por la mañana o por la noche, y antes del afeitado. Si sois adictos al autobronceador, el peeling antes de su aplicación lo hará mucho más eficaz.

Un cuidado para todas las pieles

El peeling se dirige a todos los hombres y puede ser eficaz sobre cualquier tipo de piel. Cuidado únicamente con las pieles sensibles, puesto que conviene escoger productos adaptados, no frotar demasiado, y sobre todo no realizar un exfoliación después del afeitado que de hecho irrita el rostro, por tanto no es conveniente irritarlo una segunda vez.