• Autor de la entrada:
  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura

Una de las frases más repetidas por entrenadores y aficionados al deporte, así como cualquier médico o persona relacionada con este mundo, es que hay que hidratarse correctamente.
Esto es del todo cierto, y más cuando se acerca el buen tiempo y las temperaturas ascienden, con la consiguiente demanda por parte de nuestro metabolismo de más agua y azúcar para llevar a cabo el desgaste físico acorde a nuestra actividad que estemos practicando.
Vigilar la forma de beber 1Está claro que el agua, o alguna bebida, es el elemento principal y el recurso más utilizado para hidratarnos. Pero esto, que en principio es una virtud, puede ser peligroso, ya que mucha gente no bebe adecuadamente líquidos: o abusa o se queda a medias.
Curiosamente, el hidratarse no solo es ir bebiendo agua cada vez que uno tiene sed, sino adecuar esa ingesta de líquido al entrenamiento que estemos realizando. Por ejemplo: si estamos corriendo en la playa bajo un sol de justicia, es muy práctico ir tomando pequeños tragos de agua cada cierto tiempo, a fin de que no desfallezcamos en el intento.
Si al contrario estamos jugando un partido de básquet en la calle, es recomendable beber también cada cierto tiempo, pero realizar un parón para combinar esta hidratación con un descanso del cuerpo en general y poder tomar algo de aire.
Pero no solo de agua vive el deportista, y tenemos a nuestra disposición toda una tonelada de productos y bebidas para mejorar aún más nuestra hidratación.
Es altamente recomendable, ya que la mayoría tienen azucares, cosa que nos irá muchísimo mejor para aumentar nuestro rendimiento y reemplazar la energía que estamos gastando en la práctica deporta, a parte, también tendrán más calorías que la propia agua: todo son ventajas.
Otro tema controvertido sobre hidratación es si beber mucho o poco. Muchos expertos se inclinan por la opción de realizar pequeños sorbidos, pero reiterados durante la práctica deportiva, sobre todo si estamos realizando un esfuerzo anaeróbico. Otros recomiendan una buena dosis de azúcar después de un entrenamiento largo.
Sea como fuere,  ¡nada mejor que un buen zumo de naranja natural cuando volvemos de una buena jornada de deporte ante pleno sol!