• Autor de la entrada:
  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura

Debido al cambio de estación por el que estamos atravesando, es necesario tomar ciertas precauciones sobre el consumo de ciertos alimentos. Es por eso que presentamos esta serie de puntos mediante los cuales te será fácil prevenir posibles intoxicaciones alimenticias.
En primer lugar, y aunque parezca obvio, no olvides fijarte bien en la fecha de envasado de las carnes rojas o blancas.
Si es posible, elige productos cuya fecha de vencimiento no sea en el mismo día de ser adquirido.
En el caso de elegir el consumo de carne roja, debes realizar mayor hincapié en que ésta sea bien fresca. A la hora de controlar su fecha de caducidad, es importante que sea lo más alejada posible de la fecha de consumo.
Consejos para evitar las intoxicaciones alimenticias 1Antes de cocinarlos, procura lavar bien ciertos los alimentos. Sobretodo, si se trata de alimentos como vegetales y verduras, que van a ser consumidos con su cáscara.
Quienes adquieren grandes cantidades de carnes, sean rojas o blancas, para congelarlas y fraccionar su consumo, deben saber que una vez descongelada no se debe volver  a congelar, a no ser que ésta ya esté cocida.
En cuanto al pescado, antes de comprarlo, es indispensable que te asegures de que tenga textura suave, y no pegajosa. Además, debe tener carne firme, ojos brillantes, agallas rojizas, olor agradable y escamas adheridas.
 La carne roja, al igual que el pescado, debes adquirirla en lugares limpios, confiables, donde haya rotación de clientela.
 Cocina bien los alimentos. No es recomendable que los ingieras cocidos a medias, especialmente cuando se trata de huevos, hamburguesas, carnes de pollo, pescado y cerdo.
Para evitar la multiplicación de los gérmenes, sería ideal que consumas los alimentos en el momento de su cocción. Cuanto más reposa el alimento cocido a temperatura ambiente el riesgo de multiplicación es mayor.
En el caso de que guardes alimentos cocidos, ten en cuenta que puedes conservarlos en la heladera durante 2 ó 3 días aproximadamente. Pasados los mismos los alimentos ya no deberían ser consumidos.
 Si se trata de lácteos, es recomendable que no se refrigeren restos que ya fueron expuestos al fuego, es decir, sobrantes. Sobre todo, ten en cuenta esto si se trata de leche o yoghurt que consumen los menores de la familia.
Los alimentos que son conservados luego de cocinarse, antes de consumirse deben recalentarse bien, de manera que supere los 70º y mueran las bacterias.
Es imprescindible, para evitar intoxicaciones, que los alimentos cocidos nunca entren en contacto con los crudos. Al momento de preparar una receta en la cocina, ten una tabla para cada alimento, como carne cruda, vegetales y alimentos cocidos.