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Parece que a las españolas le gustan los hombres con el culo grande, firme y bien formado, o por lo menos es lo que se puede suponer cuando nos enteramos de que los españoles cada vez solicitan más un aumento de glúteos para potenciar esta parte del cuerpo a través de implantes de silicona.
Lo afirma Jesús Benito, cirujano plástico responsable de Medicina Estética del Antiaging Group Barcelona, los españoles recurren a los implantes para potenciar el glúteo mayor y lograr que la nalga parezca más musculada.
La gluteoplastia no es ni de lejos un procedimiento libre de molestias e implica riesgos como cualquier otra cirugía; lo más habitual es utilizar un implante de silicona cohesiva que se coloca debajo del músculo glúteo mayor.
culo impactanteLa operación se lleva a cabo con anestesia general para que el músculo quede relajado y se pueda introducir fácilmente la prótesis, que suele ser más plana y con más resistencia que las utilizadas en el aumento de mamas. Generalmente, los implantes van desde los 180 gramos hasta 350.
Para colocar el implante el especialista hace una incisión en el pliegue entre ambas nalgas, lo más bajo posible para que quede bien oculto y no se aprecie la cicatriz.

Cuidados postoperatorios

Después de la cirugía, los dos primeros días se pasan en la clínica boca abajo aunque durante las dos primeras semanas posteriores a la operación se recomienda mantener esta postura para dormir, luego es posible levantarse.
Durante una semana no se debe estar sentado más que lo imprescindible para que no se comprima la zona operada.
Asimismo, es importante evitar durante cinco o seis semanas cualquier tipo de ejercicio físico en el que participe el glúteo.
Cumplir con las recomendaciones que nos da el médico es muy importante para que la cicatriz quede estable y la prótesis no se desplace ni provoque asimetrías.
Aunque el riesgo de infección es bajo, se requiere una higiene muy cuidadosa hasta que se quiten los puntos y es necesario tomar antibióticos durante los diez días posteriores a la intervención para minimizar los riesgos.
Un último detalle: El coste de la operación suele ascender a unos 6.000 euros.
¿Pagarías esa cantidad por tener un culo de escándalo con relativa facilidad?