La depilación con cera fría mantiene unos resultados óptimos durante tres semanas. Pero, éste es el máximo de tiempo que se mantiene el vello sin crecer. Al cabo de varios días, la espalda, o el torso comienzan a picar de nuevo.

La depilación con cera fría es un método bastante doloroso. Esta depilación consiste en aplicar una serie de bandas sobre la zona que se va a tratar, y luego se retira de un golpe seco y rápido, en el sentido contrario al crecimiento del vello.

Inútil advertir que si pretendéis depilaros la zona baja del vientre (y no nos referimos al pubis), o al torso, el dolor puede incluso llegar a ser intenso.

Es imperativo que el vello esté lo suficientemente largo para poder depilarlo, o para renovar la depilación. El funcionamiento de la depilación a la cera fría presenta ciertas ventajas, pero también varios inconvenientes. La cera se adhiere a al vello (y no a la piel) y después se retira hasta la raíz, cuando se quita la banda de cera de la piel.

modelo en slipDe sobra sabemos que los folículos pilosos tardan unas tres semanas en volver a crecer, y que el nuevo vello es más suave, y que por lo tanto en las siguientes aplicaciones se va alargando el tiempo de depilación, pero esto es absolutamente FALSO.

En realidad, se debe contar entre una o dos semanas como máximo el tiempo de crecimiento del nuevo vello.

Para una correcta aplicación de la cera fría, la banda se debe frotar entre las manos para calentar la cera. Después, se abre con cuidado la banda, con el fin de obtener dos bandas de cera fría.

Después se aplica una de las bandas de cera sobra la zona que se va a depilar, y se aprieta varias veces en el sentido contrario del crecimiento del vello. Finalmente, con la piel estirada con una mano, se tira de la banda con la otra. El gesto debe ser rápido y seco.

Para retirar el resto de cera, normalmente con el producto se proporcionan unas toallitas especiales. En cualquier caso, también va muy bien el aceite corporal.