A menudo hablamos de la importancia del desayuno como parte de una dieta equilibrada. Pero eso no implica necesariamente que ayude a bajar de peso. Investigadores de la Universidad de Alabama dicen que, a pesar de la creencia popular, saltarse el desayuno no impide la pérdida de peso, aunque tampoco la favorece.

El desayuno y la pérdida de peso

El estudio, publicado en la revista médica The American Journal of Clinical Nutrition, examinó el efecto de la ingesta o no del desayuno en 309 adultos con sobrepeso moderado, con edades comprendidas entre 20 y 65 años, y que estaban tratando perder peso.

Durante un período de 16 semanas, se les aconsejó a los grupos experimentales que omitieran o no el desayuno, mientras que el grupo de control consistió en pacientes que comieron el desayuno y en otros que no lo hicieron. Ninguno de los miembros de este grupo había sido supervisado en la cuestión de desayuno y sólo había proporcionado información sobre una nutrición saludable.

Desayuno completoEl autor principal del estudio, Emily Dhurandhar, profesor asistente en el Departamento de Comportamiento de la Salud, afirma que no hay pruebas que aconsejen a sus pacientes que comer en el desayuno conduce a la pérdida de peso.

«Estudios anteriores han mostrado una correlación entre los dos, no necesariamente una relación de causa-efecto», dijo Emily Dhurandhar. «Por el contrario, hemos utilizado un ensayo amplio controlado y aleatorio para determinar si es o no, recomendable el desayuno, y si tenía una causa y efecto en la pérdida de peso.

Pero entonces, ¿qué es el desayuno?

Considerado como la comida más importante del día, desde hace tiempo se ha dicho que el desayuno juega un papel importante en el control del peso.

Muchos nutricionistas creen que la mañana es el mejor momento para tomar la comida más importante del día, ya que reduce el hambre en horas y concentra la toma principal de calorías para que puedan ser gastadas durante la jornada.

«Ahora que sabemos que asesorar a los pacientes para que tomen el desayuno todos los días no tiene ningún efecto diferencial sobre la pérdida de peso, podemos seguir adelante y explorar otras técnicas para mejorar la eficiencia», dijo Emily Dhurandhar. «Debemos tratar de entender por qué tomar o no el desayuno no tuvo efecto sobre la pérdida de peso, a pesar de la evidencia de que el desayuno podría influir en el apetito y en el metabolismo».

Priorizar la ingesta de huevos

Si el estudio de Emily Dhurandhar examinó los efectos del desayuno en los pacientes del estudio, no especificó lo que consumían.

Otro estudio de 2008, publicado en el International Journal of Obesity, encontró que los pacientes que estaban en ese plan que habían estado comiendo dos huevos en el desayuno, perdieron 65% más de peso que los que habían comido un panecillo con el mismo número de calorías.

El responsable del estudio, Nikhil V. Dhurandhar, explicó que el contenido rico en proteína del huevo aplaca el hambre de los pacientes, en cualquier dieta, durante todo el día.

Los pacientes que comían huevos también indicaron que se sentían con más energía y perdieron 61% más de peso que los que no lo hicieron.