Para desprenderse de la acumulación de impurezas debidas a la contaminación, a las secreciones de sebo y a la transpiración, la limpieza cotidiana de la piel es algo indispensable. Además, una piel limpia, más tonificada, y un vello blando facilitan el rasurado con la cuchilla. La piel debe estar perfectamente limpia antes del afeitado.

Para no secar aún más e irritar la piel, se debe evitar el uso de un jabón común, que es agresivo para la piel de la cara, al igual que los cuidados a base de mentol (irritante) y las lociones que contienen alcohol.

hombre después del bañoEl uso de una leche o un gel limpiador es lo más recomendable. Entre otras cosas porque respeta el pH de la piel y su equilibrio, y también permite limpiar eficazmente, a condición de retirarlo después con un algodón o con agua. Un vello mojado es más fácil de cortar.

Después de la fase de limpieza propiamente dicha, se debe mojar la cara con agua caliente, insistiendo en las partes donde los vellos son más duros, haciendo que la piel se ponga más flexible. Se deja actuar la espuma uno o dos minutos. Después del afeitado, es importante enjuagar cuidadosamente la piel con agua fría, y secarla después a base de golpecitos con la toalla, y siempre sin frotar.

Evitar los riegos de infección local

  • Cambiar regularmente las cuchillas de la maquinilla.
  • Lavar a diario la brocha de la espuma, para controlar el desarrollo de bacterias.
  • Enjuagar con alcohol la rejilla y las cuchillas de la maquinilla eléctrica.
  • Para las pieles grasas con granitos y con poros dilatados, limpiar la piel con un producto adaptado, del que estemos seguros de que no irrita la piel, puesto que provocaría un aumento de la secreción de sebo.
  • Aplicar después del afeitado un gel que absorba el exceso de sebo.
  • Una vez a la semana aplicar una mascarilla desincrustante para eliminar los puntos negros.

También se puede mencionar el sistema de parches, que es muy eficaz sobre los puntos negros y los granos. Difundiendo un activo que se amalgama con el sebo para permitir despegar y retirar las impurezas. Los resultados son eficaces e inmediatos.