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Karol Bielecki, de 28 años, es un jugador polaco de balonmano, apodado el «cañonero» representa a día de hoy uno de los ejemplos de superación deportiva de los que todos deberíamos estar más que orgullosos.
Esta semana, en el Rhein-Neckar Löwen (el equipo alemán donde juega, o más bien cañonea) contra el Goppingen ha marcado la friolera de 11 goles, consiguiendo una buena remontada y acabar con un emocionante resultado final de partido 28 a 26. Un equipo, todo hay que decirlo, que ha quedado muy completo, y que se espera que de alguna que otra campanada a nivel europeo esta temporada. Todo esto, no sería anormal ni para los que no somos forofos de este gran deporte, pero es que Karol, consiguió esos 11 goles y volver a ser el cañonero del equipo alemán con un ojo de menos.
La superación se llama Bielecki 1Tras un accidente fortuito en un partido de selecciones, Karol perdió la vista de un ojo, lo que ya hacía pensar en las peores predicciones de su vida deportiva, de hecho, las dos operaciones posteriores a las que se sometió no propiciaron una mejora ocular, de esta forma, se quedó anulada su visión de un ojo. Como todos sabemos, esto hace que nuestra percepción y visión sea menor, impidiendo una visión correcta de las paredes y de los ángulos. Después de un periodo duro de re-educación de la vista, y sobre todo de adaptación, ahí hemos visto a Karol de nuevo.
Por ello, esos 11 goles, y los que vendrán por delante, son tan valiosos, y demuestran y nos dan lección de como la re educación y la adaptación al medio deben ser los elementos principales que nos guíen en nuestro camino hacía los resultados que queremos. Así, que con su ejemplo, debemos sentirnos inspirados en nuestros entrenamientos y entender que aunque tengamos pequeños escollos, o grandes montañas por delante, con esfuerzo y dedicación podemos superarlos sin problemas.
La historia de Karol, simplemente pone los pelos de punta.