El té verde es un buen aliado para conservar la juventud de la piel, gracias a su alto contenido en antioxidantes, estos últimos frenan el proceso de envejecimiento y previenen las enfermedades. Una o dos infusiones de té verde al día ayuda al bienestar de la piel, a su vitalidad y a atenuar las líneas de expresión.

Es bueno saber que su consumo no está recomendado para mujeres embarazadas, niños y personas que sufren hipertensión.

La manzanilla

La manzanilla es un gran calmante natural y, además de sus cualidades antiinflamatoria, es muy apropiado como ingrediente por sus muchos productos cosméticos y por sus magníficas virtudes rejuvenecedoras. También ayuda a aclarar y limpiar la piel sensible en profundidad, por lo tanto tomar una infusión de manzanilla como loción tónica es una buena idea. Aconsejamos tomar una infusión de manzanilla una vez al día justo antes de acostarse.

El romero

Si buscáis una solución natural para recuperar la elasticidad natural de la piel, la infusión de romero es una gran idea. Esta hierba contiene elementos nutritivos, antioxidantes y vitaminas que protegen las funciones principales de la dermis. La piel sensible tendrá un aspecto sano, bonito, y firme. El romero reduce los poros y elimina los puntos negros en razón de sus propiedades astringentes.

Se puede aplicar directamente sobre la piel del rostro.

Hombre de rostro atractivoLa lavanda

Se trata de una de las mejores infusiones para la piel. La lavanda es un excelente remedio natural contra las afecciones cutáneas como el acné o la dermatitis. Se trata de un potente bactericida, antiséptico y cicatrizante, eficaz en caso de heridas y para evitar las marcas o manchas de la piel sensible. Se puede tomar una taza de esta infusión al día y utilizarla también como limpiador facial.

El té blanco

El té blanco ha revolucionado el mundo de la belleza, por sus beneficios para la piel sensible. Entre sus cualidades más importantes, se encuentra su acción antioxidante, que frena drásticamente los signos del envejecimiento y acentúa la producción de colágeno, sustancia indispensable para que la piel sensible se mantenga joven y flexible. Se toman de una a dos tazas al día de té blanco y se comienzan a sentir los beneficios sobre la piel.