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Cada año, en el mes de noviembre, muchos hombres lucen un bonito bigote para el certamen llamado “Movember”. Pero, ¿cómo exhibir un bonito bigote? No cabe duda de que el bigote está de moda. En el mes de noviembre, para el certamen Movember, son muchos los hombres que se dejan crecer la parte superior de la barba. Ciertamente da seguridad, carisma, presencia, elegancia, pero para que todo esto sea posible, es necesario tener paciencia y aprender ciertos gestos indispensables.

La paciencia, cualidad primera del bigote

Evidentemente, para mostrar un bonito bigote, hay que comenzar por ser paciente. Lo más largo es esperar a que crezca. Si ya se tiene barba, es más fácil o más discreto. Pero en 2 semanas, se consigue obtener algo que se parece bastante a un bigote. Hay que olvidarse de la recortadora, y solamente utilizar un peine corto y unas tijeras finas.

Para que el bigote sea bonito, debe ser lo suficientemente grueso y poblado. Por tanto, hay que esperar para que tenga el número suficiente de pelos. Ya se está listo cuando los pelos superiores del bigote consiguen alcanzar los pelos inferiores. Mientras tanto, se recortan, pero con suavidad y regularidad.

Barba y bigote

El bigote se cuida

Se empieza por peinar los pelos hacia abajo antes de recortar la línea del labio con ayuda de unas tijeras. Más vale cortar varias veces que pasarse retirando demasiado pelo de un solo tijeretazo. Hay que dejar algo más de longitud en las comisuras, lo que permite escoger el estilo de bigote. Se pueden hacer pruebas, pero siempre respetando el sentido del crecimiento de los pelos.

Una vez que tenemos un bigote presentable, hay que recortarlo, al menos una vez por semana. También conviene lavarlo, al menos una vez al día, con jabón natural. Igualmente, se puede utilizar cera para bigote para probar diferentes formas.

Cosméticos para bigote

Lo hemos dicho en las líneas anteriores, pero un resumen puede resultar bastante práctico en este momento.

Para el cuidado del bigote, es necesario:

Un peine: para desenredar los pelos o para preparar el recorte. Conviene cepillarlo a diario, cosa que vale igualmente para la barba. Es preferible utilizar un peine con los dientes más estrechos de un lado y más abiertos del otro.

Un par de tijeras: prácticas para el cuidado de los detalles. Las tijeras deben ser finas para permitir un corte casi milimétrico. El movimiento se debe acompañar con el peine e ir cortando todo aquello que rebasa el límite. Incluso estas tijeras de tamaño pequeño son muy útiles para recortar las cejas.

Una cuchilla: evidentemente, para realzar el bigote, el resto de la cara debe estar perfectamente rasurado. Y para ello, es necesario tener a mano una maquinilla de afeitar o una cuchilla. Para un estilo irreprochable, lo ideal es el uso de la cuchilla tradicional de barbero.

Cera para bigote: este producto es indispensable si se desea dar una forma particular al bigote. Al igual que el gel para el pelo, una pequeña cantidad aplicada con los dedos es suficiente para moldear el bigote a placer, aunque no es obligatorio darle la forma del bigote de Dalí.

Algunos consejos para el cuidado del bigote

Un bigote descuidado ofrece siempre un aspecto poco presentable. Por el contrario, un bigote bien cuidado ofrece habitualmente la imagen de un hombre cuidadoso y meticuloso.

Siempre conviene escoger el corte de bigote que mejor se adapte a cada personalidad, o a lo que se desee reflejar, y también al rostro. Conviene recordarlo periódicamente y utilizar un producto a base de proteínas para flexibilizar los pelos con el fin de que estén menos duros y piquen lo menos posible.

La primera vez, se puede acudir a un barbero para pedirle consejos en cuanto al estilo del bigote que mejor se adaptaría a la forma de vuestra cara.