Nacida hace 15 años solamente, la bicicleta de spinning es una bicicleta de entrenamiento más o menos sofisticada, utilizada en su mayoría en los gimnasios. Sus beneficios para la salud son incontestables y explican sin duda el éxito que conoce esta bicicleta de alta gama. Veamos algunos consejos de compra para adelgazar con la bicicleta de spinning en casa, al propio ritmo de cada deportista.

Bicicleta de spinning para una puesta en forma excepcional

Para los neófitos, adelgazar con una bicicleta de spinning puede ser algo complicado porque este aparato de entrenamiento suele llamarse bicicleta estática, body bike, spin bike, bicicleta indoor cycling, RPM.

Concebida para permitir a los grandes deportistas entrenarse a alto nivel de rendimientos cuando el clima no permite entrenarse en el exterior, la bicicleta de spinning es ideal para mantener la forma porque su práctica permite:

Bicicleta de spinning

Quemar mucha energía, una sesión de 60 minutos permite quemar 700 calorías, adelgazar con una bicicleta de spinning por lo tanto es indispensable para eliminar la masa grasa, reducir eficazmente la celulitis y combatir la obesidad.

Reforzar la masa muscular, estimular el sistema cardiovascular, reforzar el equilibrio, evacuar el estrés y la tensión nerviosa, aumentar la resistencia al esfuerzo y mejorar la resistencia.

La bicicleta de spinning permite trabajar zonas determinadas para mantener un cuerpo perfectamente esculpido.

¿Cómo elegir una bicicleta de spinning?

Adelgazar con una bicicleta de spinning implica comparar diferentes características técnicas de modelos ofrecidos y tener en cuenta las propias capacidades físicas del usuario. En efecto, existen varias categorías de Body bikes, para principiantes o usuarios ocasionales, para deportistas confirmados o para deportistas profesionales.

Antes de comprar una bicicleta de spinning, es indispensable estudiar los siguientes puntos técnicos:

La posibilidad de ajustar al milímetro el manillar, para permitir un pedaleo de bailarina, y en posición sentada que sea cómoda y con un sillín regulable en profundidad y en altura, en función de la morfología del deportista.

La rueda de inercia puede moverse a través de una cadena, o a través de una correa. El peso de la rueda de inercia de una bicicleta de spinning es un criterio de elección esencial. Tiene que ser de al menos 12 kilos para un usuario principiante, de 18 kilos para un deportista medio que desea entrenarse con frecuencia, y de 22 kilos para un ciclista confirmado y entrenamientos intensivos.

La rueda de inercia determina la estabilidad del aparato, la fluidez del pedaleo y la potencia del esfuerzo a proporcionar a lo largo del entrenamiento. El sistema de resistencia: de él depende la intensidad de cada sesión de biking. Puede ser de patines para diferentes grados de resistencia, unos tampones entran en contacto con la rueda de inercia, un sistema de resistencia parecido al de una bicicleta de pista.

También puede ser magnético motorizado: unos imanes se aplican sobre la rueda de inercia y ofrecen un sistema de frenado gradual cuya intensidad depende del número de imanes. Silencioso, este sistema de resistencia es controlado gracias a la consola de la bicicleta de spinning.

Los sensores cardíacos, todos los modelos de bicicleta de spinning no van equipados con este accesorio. En todo caso, el spinning es un deporte intensivo, y se recomienda escoger una bicicleta con sensores cardíacos con el fin de trabajar y vigilar el pulso a lo largo de la sesión. Es bueno saber que si se opta por una bicicleta de spinning sin sensor cardíaco, es indispensable equiparse con un cardiofrecuencímetro en cada sesión.