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Ya estamos en plena primavera y es quizá una de las épocas del año donde no se sabe como actuar en montaña de forma correcta. Esto es debido a que los sucesivos cambios en el clima hacen que las condiciones meteorológicas varíen con frecuencia, y muchas veces sin necesidad de avisar, por ello, aunque podemos bajar las alarmas en algunos aspectos de los que hablaré más adelante, si que debemos tener una precaución quizá mayor que en meses anteriores y que nos pueda llevar a situaciones de riesgo.

En primavera empiezan a subir las temperaturas, apetece más salir de casa, y la montaña es un destino estupendo para pasear y comenzar a ponerse en forma de cara a la temporada de verano. Las excursiones y las ascensiones son más fáciles, ya que en buena parte desaparece el hielo y la nieve, y los pocos reductos que queden de esta pueden ser ciertamente superables sin mayores dificultades.

Flores y cielos impresionantes para la montaña en primavera

También otro factor primordial es el de la luz, hay más horas de sol y esto hace que podamos ir con muchas más calma o poder llegar más lejos de lo que nos dejaba la luz solar en invierno. Todo empiezan a ser ventajas.

Ante los cambios meteorológicos lo más importante es llevar un equipo adecuado, aunque parezca que haga buen tiempo es primordial unas buenas botas que nos protejan del barro y del agua, así como de la humildad. La razón para esto es simple, puede haber llovido en cualquier momento, y por las noches las temperaturas son bajas y dejan mucha humedad, el calzado para superar charcos, barro y demás es muy importante, y no debemos dejarlo de lado. Tampoco hay que olvidar en el equipaje componentes como el chubasquero, o en nuestro atuendo escoger aquellas prendas que nos puedan dar un plus en términos de ser impermeables.

La primavera es una etapa magnifica del año para disfrutar de la llegada del verano, de la salida de muchos animales y flores, y de hacer millones de fotos de estampas montañeras increíbles, pero no debemos olvidarnos que estamos en montaña, que las condiciones meteorológicas son fácilmente cambiantes, y que ante estos elementos solo podemos ofrecer resistencia con nuestra precaución y cuidado, la prevención es nuestro mejor amigo.