Normalmente acusadas de ser incompletas, las proteínas vegetales no dejan de ser aportes interesantes, basta con saber utilizarlas correctamente para beneficiarse de sus ventajas. La proteína de guisantes no forma parte de las proteínas favoritas, y se clasifica de atrás de la whey, la proteína de arroz y de soja, pero la proteína de soja tiende a ser cada vez menos utilizada teniendo en cuenta la presencia de fitoestrógenos.

Un producto hipoalergénico

La proteína de guisantes que vuelve con fuerza, puesto que no tiene productos lácteos, ni gluten, ni colesterol, y es hipoalergénico, se está convirtiendo en la preferida de los intolerantes, puesto que no provoca hinchazón ni efectos secundarios.

La proteína de guisantes aporta 21 gramos de proteínas por dosis con un buen perfil de aminoácidos, e impide la degradación de las proteínas musculares tras el entrenamiento. Al parecer es más eficaz que la whey para el crecimiento muscular y la recuperación. Como todas las proteínas, tiene un efecto que ayuda a perder peso y permite quemar las grasas y construir músculo, además de provocar un efecto saciante.

Entrenamiento

Igualmente, el consumo de L-Glutamina (sobre todo post-entrenamiento) ayuda a reponer los niveles de aminoácidos, que disminuyen tras el entrenamiento. La reposición de estos niveles es un componente fundamental en la producción de nuevas proteínas y la optimización de la recuperación. En la tienda online Myprotein es sencillo adquirir este producto.

Pero la proteína de guisantes reduce igualmente la presión arterial y el riesgo de enfermedades coronarias o renales. También regula la tasa de azúcar sanguínea e impide los picos de glicemia.

Una alternativa real

Esta proteína de guisantes comienza a ser utilizada como ingrediente en ciertos productos, reemplazando a la harina de soja, ya que contiene un 90% menos de grasa. Además, la proteína de guisantes no se enfrenta a la polémica de los OGM y puede incluso a representar una alternativa a los derivados de las nueces para las personas alérgicas a las barras de proteínas, u otro tipo de complementos.

Con la proteína de guisantes, nos adentramos en la moda de las legumbres que vuelven con fuerza en tanto que nutrientes sanos. La proteína de guisantes destrona descaradamente a la soja, por el hecho de su perfil prácticamente completo en aminoácidos. No obstante, todavía le faltan algunos, por eso habría que utilizarla en alternancia con otras proteínas para obtener la ración ideal diaria para el refuerzo muscular, la salud cardiaca y la combustión de grasas.

Las proteínas para perder peso

El reciente descubrimiento de una molécula capaz de destruir las grasas empezaría a ser decisivo. Esta molécula, en realidad es una proteína, actuaría activando las mitocondrias para quemar las grasas convirtiéndolas en energía. Esta proteína que se llama perilipina estaría situada en la superficie de las gotas de grasa en las células y podría aumentar la combustión de las grasas.

La grasa del hombre puede acumularse y almacenarse en los músculos, en el hígado y el corazón, órganos que no están preparados para esto, y por lo tanto molestar en su funcionamiento. Lo ideal es poder desprenderse de estas grasas para convertirlas en energía.

La perilipina actúa a nivel de las mitocondrias

En experimentos realizados tanto en cultivos como en ratas, si se estimulan las células para liberar sus grasas almacenadas en las gotas de grasa, la perilipina es capaz de desplazarse hacia el núcleo de la célula, para trabajar conjuntamente con otra proteína, con la finalidad de crear otras mitocondrias, aumentando así la capacidad para quemar las grasas.