¿Os encontráis estresados? Hoy presentamos tres cuidados wellness muy de tendencia que deberían permitir recuperar la serenidad. En concreto nos referimos a la sauna japonesa, el cajón de flotación, y el janzu. Se trata de los nuevos cuidados antiestrés que combinan calor y agua para una desconexión total.

La sauna japonesa, el baño de sol

La sauna japonesa difunde un calor seco como el de una sauna clásica generada por infrarrojos que permiten al cuerpo transpirar en profundidad. Desintoxicación y relajación son los elementos fundamentales de este tratamiento. Solamente la cabeza sobresale del aparato en forma de tubo.

Sin los rayos UV, el calor se intensifica a lo largo de la sesión que dura una hora. El cuerpo transpira como durante una sesión de deporte intensa. Se sale de la sauna relajado y más ligero. Hasta seiscientas calorías se pueden perder. La técnica se puede realizar en muchos spa e institutos de belleza.

Método Janzu

El cajón de flotación, la meditación sin peso

La flotación y aislamiento sensorial es una de las técnicas más en boga para los cuidados wellness. La meditación seduce cada vez a más adeptos para combatir el estrés, la depresión, las adicciones y buscar otro tipo de sensaciones. El principio del cajón de flotación, perfeccionado en los Estados Unidos en los años 50, propone explorar un estado meditativo flotando en un agua saturada en sal de magnesio.

La inmersión total permite centrarse sobre uno mismo y sus sensaciones. Lo que preocupaba una hora antes, ahora parece totalmente trivial. Varios institutos de belleza tienen lugares dedicados a la técnica, y ofrecen esta experiencia muy en boga en muchos países de Europa.

El janzu, una invitación al viaje

Janzu significa río Pacífico en chino. El janzu nació en los años 90 en la India y ha sido desarrollado como técnica de cuidados por el mexicano Juan Villatoro. Inspirado en técnicas chamánicas de regresión, es como una danza acuática para dejarse llevar. Basta con dejarse guiar por un coach formado en movimientos suaves, estiramientos, y algunos puntos de presión para activar la energía.

Este cuidado comprende también pasos con la cabeza sumergida en el agua durante 3 segundos. En un agua a una temperatura de 34º C, es posible que allí se dejen las angustias y las preocupaciones para hacer una gran limpieza.

Este cuidado wellness es ideal para combatir los dolores y las rigideces musculares, las migrañas, los síntomas relacionados con el estrés, los desarreglos del sueño y la fobia al agua. Este método de bienestar se recomienda particularmente en mujeres embarazadas. No cabe duda que los métodos de relajación, tanto corporal como mental son necesarios para eliminar tensiones, y especialmente el estrés de la vida diaria.

Someterse a un método wellness para relajarse es hoy en día una necesidad, y no tanto una cuestión de placer. Las posibilidades para recuperar la armonía entre el cuerpo y la mente, dejando al lado las preocupaciones y tensiones de la vida cotidiana es un camino que no conviene desaprovechar. Cada cual debe encontrar el mejor camino, que más al alcance de su mano esté, para liberar las malas energías y dejar que la luz de la serenidad entre en su propio interior.