Para este año 2012, la casa de perfumes y de velas Phaedon nos sorprende con una creación unisex original. Sólo con escuchar su nombre, el perfume Dzhari nos transporta a un ambiente oriental y lleno de exotismo. La fragancia evoca un viento cálido procedente del Sahara.

El viaje comienza con notas licorosas que recuerdan el vino blanco de Málaga. Después viene un cóctel amaderado, acentuado por la suavidad de los dátiles. En notas de fondo encontramos un acorde de Tierra Cocida que se mezcla sutilmente con el Haba Tonka para aportar algo más de calidez.

Cendres de Thé de Phaedon

Al igual que una invitación a una actitud zen y a la evasión, Cendres de Thé es otra creación de la casa Phaedon. Presentado en un frasco negro que expresa toda su sobriedad, este perfume se abre con notas especiadas sublimadas por un toque de cardamomo.

Modelo mirando a la cámaraEl efluvio desvela después unas notas florales cuya suavidad queda interrumpida por el té que se mezcla con la madera de Hô, más conocida con el nombre de laurel del Japón. Este maravilloso viaje termina en notas ahumadas con toques de cedro y de musc blanco.

Manguier Métisse de Huitième Art

Se trata de una fragancia afrutada y exótica. Incluso los hombres que normalmente no saben apreciar los perfumes dulzones, sucumben a esta creación llena de imaginación. Este perfume nos hace pensar en el sol y en las vacaciones. En notas de cabeza encontramos el mango, una fruta dulce y deliciosa.

La magia continúa a través de una sutil mezcla de mango y de té, para terminar en una nota azucarada mezclada con flor de amancayo.

Ciel d’Airain de Hutième Art

El año 2012 marca el lanzamiento del perfume Ciel d’Airain. Esta vez es la pera la que se lleva la palma. Una vez más, la casa nos sorprende con un efluvio afrutado que evoca una bonita balada en medio de un vergel. Sus notas de cabeza: la pera y las hojas del peral, encierran un corazón compuesto a base de madera de peral. Un pequeño cambio de aires prolonga el efluvio, con un toque de olivo y de ámbar gris.