¿Vuestros hombros son estrechos, o de anchura igual a la de la cadera? ¿Sois relativamente delgado, con un vientre plano, bastante esbelto? Entonces lo ideal para vosotros es elegir un traje de baño de tejido apretado y que se adapte bien al cuerpo. Y la razón es que una textura más holgada os daría un efecto algo descuidado, de forma que os sobraría tela por todas partes.

Podéis llevar un traje de baño moderadamente ancho, el short tipo surfer se adapta bien, y vuestra silueta quedará más camuflada. Evidentemente, para el bronceado, lo ideal es sin duda un traje de baño ajustado y cubre lo menos posible la piel, pero tampoco tiene que ir demasiado ajustado al cuerpo.

Un cuerpo tipo pera

Esta morfología se caracteriza por unos hombros caídos, no muy anchos, y más estrechos que la cadera. Para reequilibrar la silueta, lo ideal es decantarse por un traje de baño de tejido más flexible.

Ropa-de-bañoSe debe evitar la tela demasiado ajustada, o tiesa, puesto que suele tener un efecto poco favorecedor, y que os hará más gordos. Los estampados con dibujos grandes también tienen tendencia a dar la impresión de que estamos más gordos. Si optáis por las rayas, debéis elegir las que son verticales, puesto que estilizan mucho más.

En cuanto a la forma del traje de baño, elegid un modelo que presente un elástico más bien ancho y oscuro, para dar más soltura a la zona de las caderas, pero cuidado con elegirlo con muchos pliegues, puesto que ensanchan la silueta.

Un cuerpo con curvas

¿Tenéis una silueta ancha, vuestros hombros, vuestras caderas presentan curvas y además tenéis barriga? Entonces lo que más os conviene es un material flexible, y un tejido no demasiado estrecho. Esto confiere cierta ligereza y evita el efecto «demasiado gordo». Algunos frunces y pinzas son indispensables para dar ese aire de mayor libertad y ligereza, pero siempre sin pasarse. En todas estas cosas, no conviene exagerar para no caer en lo ridículo.