Para perder peso rápidamente, normalmente hay que hacer grandes sacrificios. La mayoría de los regímenes obligan a precisar que la nueva forma de comer se debe convertir en un hábito permanente para mantener o alcanzar el peso deseado.

Si el régimen es demasiado estricto y que se siente hambre continuamente, esta fórmula no puede alargarse en el tiempo. Los regímenes puntuales permiten perder algunos kilos que se recuperan cuando se vuelve a una alimentación habitual.

Este programa está concebido para facilitar considerablemente el proceso de pérdida de peso, además de ayudar a reducir el apetito, perder peso sin sentir hambre, y mejorar la salud en general.

Eliminar el azúcar y los glúcidos simples

El azúcar y los hidratos de carbono no son un veneno, pero son una de las principales causas del aumento de peso. Pequeñas cantidades de estos alimentos no hacen daño, pero mayores cantidades pueden ser nefastas. El azúcar y los glúcidos simples se encuentran en los alimentos difíciles de controlar y que la gente come en gran cantidad.

Vientre plano

Estos alimentos están mal saturados, porque apenas contienen fibras u otras sustancias útiles. Además son pobres en vitaminas y ricos en calorías. Provocan picos de azúcar en la sangre, una secreción excesiva de insulina, y pueden provocar una alteración de la eficacia de la insulina. Una comida demasiado dulce crea dependencia, y prueba de ello es que el azúcar es adictivo.

La eliminación del azúcar y de las féculas de la alimentación permite reducir los niveles de insulina, reducir el apetito, y ayuda a perder peso sin padecer hambre.

Proteínas, alimentos frescos, frutas y verduras

Cada comida debe tener una fuente de proteínas, y al menos una fruta fresca o verduras. Muchos nutricionistas no recomiendan la fruta por culpa del azúcar que contiene, pero esto no tiene sentido por varias razones. La primera es que el hombre come fruta desde siempre, formando parte integrante de nuestro régimen alimenticio.

La segunda razón es que la fruta contiene muchas vitaminas, minerales y otras sustancias irremplazables. La tercera razón es que las frutas contienen fibras y por tanto están más saturadas que ciertos alimentos azucarados de forma artificial.

Caminar todos los días

Un programa de pérdida de peso no obliga a practicar deporte, pero es algo deseable. Si no se tiene tiempo ni voluntad para ir a un gimnasio, podemos movernos en bicicleta o caminar siempre que tengamos ocasión de hacerlo. Podemos andar hasta la tienda, ir al colegio o al trabajo, si no vivimos muy lejos. Es un método fácil de quemar al menos entre 200 y 300 calorías diarias.

Otros consejos prácticos

Para perder peso debemos beber mucha agua, café o té. Es importante satisfacer las necesidades de líquido, y el café o el té aceleran el metabolismo.

Otro truco interesante es usar platos pequeños. Los estudios demuestran que la gente come menos cuando utiliza platos más pequeños, porque actúan de forma inconsciente.

Dormir correctamente. La falta de sueño va asociada a un aumento del apetito y también del peso.

Reducir el estrés. El estrés constante aumenta el nivel de una hormona llamada cortisol. Esta hormona puede provocar una acumulación de grasa en el abdomen.

Si seguimos este plan con disciplina, podemos perder de 1 a 2 kg por semana, en función del peso inicial. Cuando nos acercamos al peso ideal, es más difícil perder los últimos kilos. Además de la pérdida de peso, este programa permite mejorar la salud en general y reducir la glucemia, los triglicéridos, el colesterol, y la presión arterial.